Vives en mí más de lo que imaginas,
en un verso… que no es más que un pretexto
para convencerte de cuanto te quiero,
en los días diarios en que llevo tu recuerdo,
a veces como una loza clavada sobre la espalda,
a veces en las tazas del café que sorbo a sorbos, despacio,
bebo en tu nombre cada mañana.
En ese primer sueño que aun disfruto despierto,
en las palabras que digo de la boca para adentro.
En los pasos que camino tras la huella de tu paso,
en el tiempo que pierdo descubriendo tus misterios.
Como vive la poesía que nace de tus ojos,
como vive en ti la fe que te robo para espantar mis miedos.
Vives en mí…
como la almohada en que construyo sueños contigo
sin que te pida permiso,
en mi plato en que desayuno esperanzas
que se enredan con tu nombre.
En aquellos libros en donde por mucho que busco
no encuentro como aprender ese lenguaje de mujer
que los hombres no entienden.
Cuando tengas tiempo.... piensa en mí.
16/02/09
3 comentarios:
exelente, eres el mejor compañero se te estima . nestor
Que buen pensamiento!!!
Me gusta leer lo que escribes amigo.
Sigue asi.
Me encanta tu trabajo, es para mi un honor y una inspiracion conocer a personajes de tu calibre y calidad humana.
un lujo leerte.
Zita
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